¿Quieres saber lo que ocurre con tu empresa durante el concurso de acreedores? En este artículo te lo explico. ¿Necesitas asesoramiento en materia concursal? Contáctame. 

 

Fases del concurso de acreedores

 

Una vez declarada la insolvencia, se inicia el procedimiento donde la empresa se somete a las 4 fases del concurso de acreedores. Cada una de estas fases, que a su vez se subdividen, cumplen con la finalidad de ejercer ciertas tareas y estudios específicos en cada caso.

 

Fase común

 

Esta fase se inicia cuando se genera la solicitud de declaración del concurso. Como se ha indicado en otros artículos, esta puede ser voluntaria si es solicitada por parte de la empresa o parte deudora, o necesaria si el solicitante es alguno de los acreedores.

El juzgado examina y estudia que la solicitud cumpla con todos los requisitos necesarios, así como con la acreditación de deuda de la empresa. Una vez hecho esto, el juez procede a asignar al administrador concursal que se encargará del caso.

En esta fase se determinan puntos importantes, como lo son: la clasificación del pago de los créditos de todos los acreedores según el orden establecido en la Ley Concursal y que formará la masa pasiva del concurso. También se define la masa activa (el patrimonio de la empresa). 

 

Masa activa

 

Aquí se determinan y valoran todos los bienes y derechos incluidos en el patrimonio del deudor a la fecha en que es declarado el concurso. También todos los que puedan incluirse hasta la fecha de conclusión del proceso.

 

Masa Pasiva

 

En esta categoría figuran los créditos existentes contra el deudor, previos a la fecha del auto que declara el concurso, y se clasifican en créditos de privilegio especial y general, y créditos ordinarios y subordinados. 

Es posible que el primer informe realizado (informe provisional) requiera de modificaciones  gracias a impugnaciones requeridas. Debido a esto, el administrador concursal generará otro informe (informe definitivo) y así se concluirá con la primera fase del proceso. 

 

Fase de convenio de la empresa durante el concurso de acreedores

 

En esta fase, se tiene como objetivo que el empresario logre un acuerdo mediante contrato firmado con sus acreedores, evitando a toda costa la liquidación del patrimonio del deudor. 

Ambas partes estarán en el derecho de presentar propuestas de convenio ante el juzgado. Las propuestas deben ofrecer opciones de reducciones de las deudas o en su defecto, propuestas de autorización de plazos de pago más largos. 

Una vez expuestas, la junta de acreedores se encargará de votar por las propuestas que sean consideradas más factibles para el desarrollo del caso. 

El resultado de la junta es plasmado en un acta, la cual, se le hace llegar al juez. Este es el que determinará si la decisión no presenta defecto o infracción alguna, de ser así el convenio será aprobado. 

Lograr con éxito un convenio, es la mejor alternativa para la empresa y su recuperación económica. Tomando esto en consideración, es conveniente para el insolvente como para los acreedores intentar alcanzar un acuerdo propicio para ambas partes.

 

Fase de liquidación

 

Si bien hemos dicho que el escenario ideal es lograr un convenio entre las partes, en algunos casos esto no es posible. Al fallar el convenio, es aquí cuando entra en funcionamiento la fase de liquidación.

De igual manera, la solicitud de iniciar con esta fase puede ser realizada por el mismo deudor en cualquier punto del proceso o por el administrador concursal. Si este determina que el deudor no cuenta con los fondos suficientes para solventar las deudas, se solicitará la liquidación patrimonial. 

Como su nombre indica, en esta etapa se liquidan todos los bienes que posea el concursado con la finalidad de lograr saldar la mayor cantidad de deudas posibles. Al ejecutarse esta fase, el deudor pierde control sobre los bienes ya que, estos pasarán bajo la supervisión del administrador concursal designado. 

 

Fase de calificación (fortuito o culpable)

 

En esta última fase el juez dicta sentencia. En base al comportamiento del deudor, se califica el concurso como fortuito (casual) o culpable. 

Es considerado fortuito si el deudor no incurre en fraude, culpa o negligencia que hubiese afectado a la situación actual de la empresa. 

Por el contrario, se considera un concurso culpable si el deudor ha actuado de manera fraudulenta o con culpa grave. Si es este el caso, el concursante sufrirá consecuencias como sanciones, indemnizaciones hacia los acreedores e incluso privaciones de libertad. También se considerará concurso culpable el que se haya presentado fuera del plazo establecido legalmente, esto es más tarde de los 2 meses desde que se conozca la situación de insolvencia de la empresa.

 

¿Qué le pasa a la empresa durante el concurso de acreedores?

 

Como ya se ha descrito con anterioridad, cuando una empresa se encuentra ante un concurso de acreedores, deberá seguir las 4 fases expuestas. 

Si se logra un convenio, se realizarán renegociaciones de las deudas entre las partes, o por el contrario, el concursado deberá enajenar sus bienes y liquidar el patrimonio.

De igual manera, la empresa durante el concurso de acreedores no está en la obligación de detener su actividad económica, a menos que en alguna etapa lo dictamine el juez. La interrupción laboral dependerá del estado financiero en el que se encuentre la empresa.

 

Recibe asesoramiento en materia concursal

 

Espero que con este artículo te haya quedado más claro lo qué ocurre con tu empresa durante el Concurso de Acreedores. Si necesitas un abogado para un Concurso de Acreedores no dudes en contactarme. Puedes hacerlo a través de Whatsapp haciendo clic en el botón de abajo a la izquierda o a través del formulario que encontrarás en la página de contacto.